Durante su intervención en el acto, organizado en Málaga por Nueva Economía Fórum, Ferrer insistió en que “el Gobierno no va a contar con la pasividad de los trabajadores ni de los sindicatos que los representan”.

Explicó que “es difícil hablar de diálogo social, aunque quizás sea más importante que nunca”. En sus palabras, mostró rechazo a la nueva reforma laboral “impuesta” por el Gobierno y afirmó que “no podemos permitir que lo que nos costó tanto tiempo construir se dinamite en un segundo”.

El sindicalista criticó que se trate a los desempleados como “coartada” para que sean nuevamente “abandonados”. “Se trata de cuentos que enmascaran el afán de lucro de unos pocos, no saldremos de la crisis así”, sentenció.

“La imposición no es el camino”, reiteró, al tiempo que abogó por recuperar el diálogo para mantener el acuerdo alcanzado hace unas semanas entre sindicatos y patronal.

Asimismo, pidió al Gobierno una partida económica destinada al empleo. “Si hay dinero para la banca, el Gobierno tiene que poner dinero para crear puestos de trabajo”, manifestó.