“Lo importante no es quitar del Diario de Sesiones un insulto que pueda proceder de un diputado o una diputada, lo importante es que no se haga el insulto”, reflexionó la presidenta en este acto informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Madrid, donde recordó que en la Junta de Portavoces ha pedido varias veces a los grupos que “no sean agresivos en sus palabras”.

“Creo que cuando un diputado o diputada o cualquier persona usa un término despectivo, insulta o falta al respecto, con eso no se hace más fuerte su argumento”, sino que sus argumentos “se debilitan tanto que ya no se escucha el argumento y, por tanto, creo que eso es una mala forma de defender las posiciones”.

Tras este análisis, Armengol apeló a que políticos y también medios de comunicación hagan un “esfuerzo” porque “a veces le damos toda la atención, toda la potencia, a lo que es la pelea del segundo” cuando “detrás de cada una de las sesiones hay muchísimo trabajo, muy intenso, de todos los que se dedican a la política". "Yo quiero ponerlo en valor sean del grupo parlamentario que sean”, ensalzó.

Armengol explicó que cuando se aprueba retirar un término del diario de sesiones no se elimina sino que, simplemente, se procede a ponerlo en cursiva, por lo que se trata de un debate "muy poco profundo" y apuesta por "debatir en profundidad" cuestiones que estén pasando y beneficien a los ciudadanos.

Por ello, consideró que debatir si la presidenta ha quitado "una palabra o no", es porque "hay una internacionalidad partidaria y ya está". "Y la acepto y la administro como mejor pueda, pero creo que lo de fondo es el ruido que estamos generando", criticó.