Para el rector de Deusto, la Universidad “no debe ser ajena al problema del paro” y tiene que alzar su voz “en el laberinto de esta incertidumbre en la que vivimos”.

En este sentido, Oraá señaló que la institución universitaria “es más necesaria que nunca para reivindicar que otro mundo es posible, con mayores cotas de libertad, de igualdad y fraternidad. Es una cuestión de deber, de visión y de responsabilidad social”.

Durante su participación en el mencionado encuentro informativo, organizado en Bilbao por Nueva Economía Fórum, Jaime Oraá se refirió a la actual situación económica como una “oportunidad” para salir reforzados en el futuro y para “reafirmarnos en los valores de generación de riqueza y empleo, innovación, sostenibilidad, responsabilidad social, espíritu de trabajo y esfuerzo, de sacrificio, honradez, etc. Valores que se han visto durante años devaluados por el brillo cegador del dinero fácil, la especulación y la cultura del pelotazo”.

UNIVERSIDAD VASCA
Tras indicar que Comunidad Autónoma Vasca tiene un sistema universitario rico, pidió “exprimir al máximo” las posibilidades que brinda este sistema, evitando “tentaciones de monopolio o reduccionistas que sólo empobrecen”.

Oraá considera además que la clasificación de las universidades en públicas y privadas “es una división claramente superada en la mayoría de los países”. A su juicio, el foco “debe estar puesto en la función social pública que ambas prestan a la sociedad, y no en la titularidad”.

Reclamó también “suficientes recursos”, ya que la búsqueda de la excelencia así lo requiere y la máxima ha de ser “mejor servicio público, el servicio de financiación claro y la excelencia”.

En este sentido, una vez fijados los criterios que deben regir el funcionamiento de la Universidad, Oraá pidió “explorar conjuntamente” las vías de financiación.

Además, señaló que el modelo propuesto está basado “en las antípodas del subsidio y la subvención”, al apoyarse “en el servicio público, la excelencia y la eficiencia”.

Para Jaime Oraá, el próximo plan universitario vasco supone “una excelente oportunidad para apostar decididamente por el conjunto del sistema universitario vasco, apostar por el país”.

Preguntado por situación política actual, Oraá dejó claro que la Universidad no debe tomar parte por ningún partido político, ya que el pluralismo ideológico y político es una seña de una sociedad democrática que tiene que ser impulsada dentro de la Universidad.

”El papel de la Universidad es el de ayudar en la formación de las personas para que sepan convivir en una sociedad muy plural, respetando los derechos fundamentales y en contra de la violencia”, concluyó.