Santacreu agregó en este encuentro, organizado en Barcelona por Nueva Economía Fórum, que España “tiene una posición diferente” y, a diferencia de la UE, no presenta un “desequilibrio comercial” con Estados Unidos. No obstante, advirtió de que “la situación es muy compleja” y terminará afectando “directa o indirectamente”.

El presidente de la Cámara de Comercio puso el ejemplo del sector de la automoción español, que si bien no tiene una exposición directa a Estados Unidos sí lo tiene a Alemania, como en el caso de Seat, y Alemania sí se verá más afectada por los aranceles. “La situación es muy complicada. Todo apunta a que es una estrategia de negociación que empieza fuerte y se va ajustando”, detalló.

Al margen de los aranceles, Santacreu sostuvo que “toda la dinámica de Estados Unidos es muy preocupante para todo el mundo en todos los sentidos”, y aludió, en concreto, a las cuestiones relacionadas con la defensa y la seguridad.

“Es inevitable repensar el sistema de defensa y seguridad de Europa y esto pasa por esta autonomía estratégica, y que Europa tenga una defensa más potente y armas y tecnologías hechas en Europa”, subrayó.

En el caso de las empresas catalanas, Santacreu apuntó que tienen “un nivel medio” para proveer a compañías de referencia en este sector. “Ahora es el momento. Empresas de diferentes sectores pueden entrar en esta dinámica”, recalcó.