Así lo señaló durante su intervención en dicho desayuno informativo, organizado por Nueva Economía Fórum, donde justificó que “las situaciones extraordinarias requieren de la adopción de medidas extraordinarias”.

Cabe recordar que el Ayuntamiento concedió a más de 3.500 bares y restaurantes que pudiesen ampliar sus terrazas, de manera gratuita, hasta el final de este año, lo que había provocado la queja de algunos vecinos por los ruidos y molestias ocasionadas.

Ante esta situación, el regidor madrileño remarcó que “la premisa de la que debemos partir es la convivencia de los vecinos”, por lo que “estamos trabajando con vecinos y asociaciones de hostelería para buscar un consenso”.

Además, continuó, “estamos trabajando en una ordenanza que nos permita conciliar la calidad de vida de los vecinos con la hostelería”. En este sentido, destacó que este sector representa un 4,5% del PIB en la ciudad y que da empleo al 6% de la población.

Por ello, el alcalde de la capital se mostró convencido de que “encontraremos un punto de encuentro y equilibrio” para mantener la actividad hostelera “con el menor perjuicio para los vecinos”.