Iturgaiz se pronunció de esta forma en un encuentro informativo en Bilbao organizado por Nueva Economía Fórum, en la que el líder de los populares vascos fue preguntado por las diferencias entre la dirección nacional de su fuerza política y Ayuso.
 
Iturgaiz informó de que el Comité Ejecutivo del PP vasco se reunió el pasado jueves y sus dirigentes coincidieron en que lo primero que debe hacer el partido es “pedir disculpas” a todos los españoles y “especialmente” a los afiliados y simpatizantes, puesto que “no se merecen” lo que está ocurriendo.
 
Señaló que el PP vasco entiende que en esta fuerza política “no sobra nadie” y que las siglas de la organización “están por encima de cualquier personalismo; por encima de todo”.
 
MENOS "EMOCIONALIDAD"
 
En cuanto a la forma de superar la crisis, Iturgaiz defendió que el partido no puede ir a un “congreso cainita” o “guerra civilista”, porque “eso ya lo hemos vivido y no lo quiere absolutamente nadie”.
 
Por este motivo, defendió que “hay que reconducir primero” la tensión existente, para lo cual consideró necesario “salirnos de tanta emocionalidad por todas las partes”. “Lo emocional debe dar paso a la racionalidad”, afirmó, al tiempo que indicó que esta serenidad es “muy importante cuando hay crisis” y se atraviesan “momentos traumáticos”
 
Defendió que el próximo congreso del PP, sea el ordinario de julio próximo o uno extraordinario antes, debe ser un “congreso de unidad”, por lo que es obligado que “todas las partes” se esfuercen por reconducir antes la actual tensión.
 
Iturgaiz añadió que su partido debe recuperar la “credibilidad” de sus siglas, puesto que es “el mayor y mejor patrimonio que tiene”. Añadió que la actual crisis en la formación popular no debe hacer olvidar que el fin de la organización es ser la “alternativa al Gobierno Frankenstein” que preside Pedro Sánchez.