Buxadé se pronunció de esta forma en un encuentro informativo en Madrid organizado por Nueva Economía Fórum, al que asistieron como invitados la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, y el líder del sindicato Solidaridad, Rodrigo Alonso.
 
Durante este encuentro, Buxadé fue preguntado por que la vicepresidenta Díaz se emocionase este jueves en un acto en el que anunció que el Ministerio de Trabajo retiraba medallas que se habían concedido en su momento a Franco y a dirigentes de la dictadura.
 
El dirigente de Vox destacó que la vicepresidenta no ha derramado “ni una lágrima” por los tres millones de parados que hay en España. “Esa es su hipocresía, su cobardía y la causa que le tiene que llevar a desaparecer de la historia política de España”, afirmó.
 
“SALVAJE POLÍTICA DE ODIO”
Al mismo tiempo, refiriéndose a la pertenencia de Díaz a Izquierda Unida, señaló que “es algo gravísimo que España sea el único país de Europa donde el Partido Comunista forme parte del Gobierno” y que esté desarrollando “una salvaje política de odio, de enfrentamiento, de confrontación, de resentimiento social contra la mitad de los españoles”.
 
Sin embargo, señaló que “lo único que nos tiene que preocupar son esos casi tres millones de españoles que no tienen empleo o que su empleo no es estable, que es casi como no tener empleo hoy en día”.
 
Al mismo tiempo, sobre la decisión del Banco Central Europeo de volver a subir los tipos de interés en la zona euro, apuntó que tras esta medida hay “muchísimas razones”, pero destacó que la UE y sus distintos Gobiernos han venido introduciendo en la economía “ingentes cantidades” de dinero, en referencia a que esto ha influido en la subida de la inflación. También se refirió a que determinadas potencias, como China, han estado “tensionando” los mercados, lo que ha empeorado la economía internacional.
 
Sobre si estos problemas podrían aliviarse con una mejor gestión de los fondos Next Generation de la UE, criticó que estas ayudas no estén llegando a las pequeñas empresas y a los autónomos, sino a las grandes corporaciones. Además, reclamó una “gestión unitaria” en España de estas aportaciones, puesto que a la “ineficacia” del Gobierno se está sumando que el Estado autonómico hace que existan “17 modelos de gestión”.