Así se expresó Puig sobre el asunto de los posibles sobrecostes de hasta 25 millones de euros denunciados ante la Fiscalía Anticorrupción por la gerencia del Hospital Provincial de Castellón entre los años 2006 y 2015, época en la que el popular Fabra y después su compañero de partido –aún en el cargo- Javier Moliner presidieron la Diputación.

“Una vez más se está demostrando que hubo un abuso y una liquidación del interés general en favor del interés privativo de un partido y de unas personas determinadas”, valoró Puig en declaraciones a los periodistas tras asistir al acto organizado en Valencia por Nueva Economía Fórum en el que intervinieron los secretarios generales de CCOO y UGT del País Valenciano, Paco Molina e Ismael Sáez.

El presidente valenciano expresó que en este momento apoya a la gerencia del hospital que ha presentado ante la Fiscalía “una serie de irregularidades que pueden sumar más de 25 millones de euros”, lo cual a su juicio significa un “enorme” robo a los intereses generales. “Tenemos que acabar con esas prácticas”, señaló Puig, para quien es además “fundamental” que se sepa “la verdad, quién se ha visto exactamente beneficiado” y que se asuman “las responsabilidades políticas que han no se han asumido”.

“La sombra de Carlos Fabra es muy alargada. Fabra y Moliner tienen mucha responsabilidad”, aseguró Puig, que también destacó la responsabilidad del PP por “una forma de hacer política y ejercer la gobernanza de la Administración que nos ha llevado a una situación de descrédito e hipoteca reputacional que nos costará mucho levantar” y que, defendió el presidente socialista, “no tiene nada que ver con el pueblo valenciano”, aunque sí le está haciendo “mucho daño”.