Así lo indicaron durante sus intervenciones en este desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum en Madrid, donde se mostraron preocupados por el Plan de Energía de la Unión Europea y sobre la cantidad de energías renovables que exige la UE.

Fernández comentó que las políticas llevadas a cabo por la Unión Europea conllevan “un riesgo de desindustrialización” en sus regiones, por lo que confió en que reconsideren sus medidas”.

También valoró que el Gobierno español esté trabajando para llevar a cabo una transición energética eficiente “con más entusiasmo incluso que la Unión Europea”.

El presidente de Castilla y León comentó que la transición energética no es acorde a los tiempos, “no es justa y, por tanto, no nos vale”. En este sentido, criticó los términos en los cuáles se están planteando los objetivos para España y para Europa que “no son ni razonables ni responsables”.

Por ello, indicó que le han dicho al Gobierno español que “no tiene sentido emprender una carrera para ver quién es el primero en llegar a los objetivos verdes”, sino que “tenemos que ser conscientes de los tiempos y objetivos que se marcan en Europa”.

En este sentido, criticó que “España está corriendo sin alternativas”, algo que consideró “muy equivocado”, por lo que “no podemos desprendernos de ciertas energías por otras alternativas que aún no son rentables”.

GALICIA SERÍA DEFICITARIA

Por su parte, Feijóo destacó que Galicia es una “gran productora” de energía ecológica, hidráulica y energética”, pero alertó de que, si se cierran las dos centrales térmicas de As Pontes y Meirama, su comunidad “sería deficitaria” en esta materia.

Aseguró que “nadie está en contra de una transición de energética ordenada”, pero matizó que “sin ser los Quijotes de Europa”. Por otro lado, señaló que “sería un error” expulsar las empresas eléctricas intensivas de su comunidad.

Por ello, el presidente de la Xunta consideró que “desenchufar mientras no tengamos otra energía a la que nos podamos enchufar en tiempo real me parece una responsabilidad” y demandó que el próximo Gobierno “se lo replantee”.

Además, pidió que “seamos sensatos” y que se establezca un precio de la luz “competitivo”, pero “no necesitamos ser los campeones de la nada”, porque es una cuestión que “conlleva empleo y rentabilidad”.