Entre los primeros citó el "incremento descomunal del poder de difusión de la mentira": "Con Internet, las mentiras nunca mueren y siempre son irreparables; es posible encontrar en la Red, como noticias, mentiras que han sido condenadas por sentencia firme".

El plagio es otro mal agigantado por la cibernética, en opinión de Grijelmo. "Las facilidades técnicas para cometerlo", indicó, "han crecido de manera exponencial e Internet ha acabado con el ejercicio saludable de verificar o moverse de la silla".

Dentro de esta categoría de males del periodismo alimentados por Internet, también incluye la "yuxtaposición ilegítima" (datos y hechos verdaderos que puestos juntos conducen a conclusiones falsas) y los retoques de las fotografías.

CONTRAINDICACIONES

Como males de nueva generación, citó el anonimato ("algunos soportes digitales permiten todo tipo de acusaciones sin verificación", pero "el anonimato no debe amparar a quien injuria o calumnia"); la desaparición de barreras de espacio y tiempo que permitan controlar aspectos como el acceso de menores a determinados contenidos, y "la información sin periodismo".

Sobre este último punto, la información sin periodismo, confesó que encuentra "muchos riesgos al periodismo ciudadano de publicación directa" que están promoviendo distintos medios digitales animando a los internautas a que envíen fotos y vídeos.

"La palabra periodismo implica unas normas y unas exigencias éticas como la verificación. No sentiría prevención hacia el periodismo ciudadano si cumpliera esas normas", afirmó.

Preguntado en el posterior coloquio si no tiene una visión excesivamente pesimista de Internet, el autor de "El estilo del periodista" afirmó que cree que la Red es el futuro, pero es un futuro con riesgos. "Internet es un medicamento muy bueno, pero como todos los medicamentos, también tiene contraindicaciones".